En estas edades tratamos de formar a los niños a través del juego en los valores propios de nuestro arte marcial. No tratamos de enseñar karate como tal, enseñamos a los niños a aprender karate, estimulamos su motricidad, lateralidad y equilibrio corporal, poniendo las bases que tienen que crear un árbol solido en un futuro. Comenzamos a construir una casa, en este caso no empezamos hacia arriba, creamos fuertes cimientos para que la casa crezca fuerte. En este enlace te damos razones para hacer Karate.